Blanco, uno de los referentes históricos del América, jugó como titular y fue capitán los primeros 36 minutos del que fue su partido 324 con las Águilas, donde se consagró campeón de liga en el Clausura 2005.
El "Temo" se retiró profesionalmente el año pasado, pero no había recibido un homenaje con América, que lo registró en diciembre para poder realizarle el homenaje.
Blanco, quien dijo que no quería hacer el ridículo en el encuentro, no decepcionó a nadie. Sin la velocidad que tuvo en el mejor momento de su carrera, el delantero estuvo cerca de conseguir un gol a los nueve minutos, cuando se sacudió la marca de un zaguero y estrelló su disparo en el travesaño.
"Me voy muy contento y muy feliz por la oportunidad de haber jugado un partido oficial", dijo Blanco en rueda de prensa. "Me voy feliz y contento. Como se los dije, no era una "cascarita", me preparé e hice lo mejor que pude durante los 35, 37 minutos que jugué".
Blanco despertó una gran ovación en la cancha del estadio Azteca a los 34 minutos, cuando realizó la jugada conocida como "Cuauhtemiña", en la que toma la pelota con sus dos piernas y salta entre dos marcadores.
A los 36 y con la afición aún coreando su nombre por la vistosa jugada, Ignacio Ambriz, decidió relevar a Blanco.